Como dice el Santo Padre “La gracia de Dios no levanta la voz, es un rumor que llega a cuantos están dispuestos a escuchar la suave brisa — aquel tenue silencio sonoro — los exhorta a salir, a regresar al mundo, a ser testigos del amor de Dios por el hombre, para que el mundo crea…”
En esta oración reflexionaremos con sus palabras en la Oración de la Vigilia como preparación para la XIV Asamblea Ordinaria del Sínodo de los Obispos.